En los programas de renting de impresoras fdm gran formato, el cliente abona una cuota mensual para el uso del dispositivo durante un tiempo preestablecido en el contrato.
En el momento que expira este contrato, el usuario tiene la opción de adquirir el dispositivo en propiedad o sustituirlo por uno nuevo más moderno y con una tecnología de última generación.
En el caso del alquiler, el cliente se limita a pagar solo por aquellos días en los que vaya a utilizar el dispositivo, que será instalado y retirado por los profesionales de Sistemas Digitales.